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La excusa perfecta para un reencuentro de hermanos

7 mayo, 2019

Juan Marcos García y Rubén García son hermanos y valencianos. El primero vive en su tierra natal, pero el segundo está afincado en A Coruña. Con una visita en verano para verse no es suficiente para ellos. Por ello, encontraron hace un par de años la excusa perfecta para compartir unas horas más allá del periodo vacacional. «Mi hermano se muda por trabajo cada cuatro o seis años e intentamos hacer al menos dos maratones juntos al año», comenta Juan Marcos (12/04/1983).

H42K Juan Marcos y Rubén García

«El Maratón Valencia Trinidad Alfonso EDP es una cita obligada, es especial para nosotros porque los dos nacimos aquí, aunque hemos vivido en otras ciudades de España. Es una prueba con una muy buena organización, un ambiente espectacular y condiciones ideales», continúa. Además de las razones del corazón, en Valencia también encuentran el lugar perfecto para mejorar deportivamente: «Siempre que queremos batir marca pensamos en hacerlo en ‘casa’. El objetivo cada año es darlo todo en Valencia. Queremos bajar de las cuatro horas juntos y ya estamos inscritos en la carrera del 1 de diciembre para hacerlo», añade. Será su tercera vez. Para entender cómo han llegado hasta aquí hay que remontarse a 2015.

«Mi cuñado Moisés corría y fui a verle a Guadassuar. Antes había hecho alguna carrera pero lo dejé. De más joven jugaba a fútbol sala pachangas con amigos y en alguna liguilla de aficionados… Poco a poco me reenganché a la carrera a pie y empecé a liar a mi hermano Rubén, que tiene tres años más que yo», prosigue Juan Marcos: «A él le venía bien para bajar de peso como a mí, así que nos pusimos el reto de preparar un maratón en un año más o menos», El primero juntos fue en Sevilla: «El 20 de febrero de 2017 nos fuimos para allá con mucha ilusión, pocas piernas y menos cabeza. Siempre recordaré que yo estaba más fuerte que él por aquel entonces. Lo llevé yo hasta el kilómetro 35 o así pero en los últimos fue mi hermano quien tiró del carro. Al día siguiente nos había inscrito para el Maratón Valencia Trinidad Alfonso EDP». Más tarde llegaron los 42.195 metros en Barcelona dos veces y Burgos.

Ahora, con la experiencia acumulada en sus piernas, Juan Marcos siempre repite la misma frase: «Un maratón es muy duro y terminarlo es genial, pero con mi hermano se hace mucho más fácil y la alegría siempre es doble».

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