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Historias 42,195km: Valencia, el combo perfecto para el estreno lejos de casa

11 junio, 2020

A Marcelo Barroso (Argentina, 1982) las distancias no le asustan. Más que nada le «motivan». Tiene a su entrenador a «1.200 kilómetros» de su San Luis natal, en Kenia. Y piensa cruzar el océano para correr los 42.195 metros por primera vez lejos de su país.

Historias 42195km Marcelo Barroso

Dentro de justo seis meses se pondrá en la línea de salida del Maratón Valencia Trinidad Alfonso EDP. Marcelo correrá sus sextos 42k. «Detrás de cada uno, hay una historia». El próximo 6 de diciembre espera sumar otra experiencia «inolvidable» por una ciudad que conoció a través de sus hermanos. Después de jugar a fútbol durante 20 años, dejó el deporte.

El aumento de peso y su frustración al no poder disfrutar completamente con la persona que más quiere, le llevó a replantearse la vuelta a la actividad física. «En noviembre de 2012 adoptamos a nuestro hijo, él tenía 7 años. Con sobrepeso se me complicaba jugar con él por lo que decidí que era el momento de bajar de peso», recuerda. La «dieta» y el «gimnasio» fueron sus primeros pasos: «En el centro me dijeron que probara a correr porque me ayudaría a adelgazar, a controlar la ansiedad». Su vida cambió: «Empecé con 15 minutos hasta que fui sumando kilómetros» y descubrió la «adrenalina» de las carreras: «Más de dos años después, corrí mi primer maratón, mi primer gran logro».

Su billete de viaje al maratón con etiqueta platino de la World Athletics lleva inherente un regalo de la vida: conocer a su ahijada, que en diciembre tendrá un año y medio. También, vivir en primera persona ese calor que transmiten las calles de Valencia al salir a animar: «Mi hermano hace un par de años se fue a vivir allí y me contó la fiesta que es la ciudad ese día. Disfruto mucho las carreras donde la gente está muy comprometida con el evento y alentando durante todo el recorrido. Transmite una gran energía. Por lo que me comentaron y he visto por internet la gente se comporta de forma impresionante», comenta. No le obsesiona el «crono», aunque su objetivo es bajar su mejor marca: 2:55:13 y Valencia es el mejor lugar para intentar hacerlo.

Esta historia ha sido publicada previamente en el diario Las Provincias

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