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Historias 42,195km: Un cumpleaños en confinamiento con vistas al kilómetro 42

29 abril, 2020

«Kilómetro 42. Pasarela azul. La victoria de los valientes, de los que luchan y no se rinden, de los que siguen a pesar de las piedras del camino. Y esos valientes somos todos nosotros, capaces de superar esta piedra llamada Covid-19 y de mucho más!». María Navío (Valencia, 1990), vive hoy su día 42 de la cuarentena, como la mayoría.

Historias 42195K - María Navio

Desde que se decretó el Estado de Alarma, en una de esas originales iniciativas para amenizar el confinamiento, decidió, impulsada por un familiar, publicar la sensación de cada día equiparándolo con sus sensaciones al paso por cada kilómetro del Maratón Valencia Trinidad Alfonso EDP. «Tengo un grupo de whatsapp de mi familia y a mi tío Fernando se le ocurrió que cada día era como un kilómetro en el que cada uno tenía una tarea que cumplir y enviarla, algo simbólico, llevar agua… y los tres que habíamos corrido el maratón, teníamos contar nuestras experiencias», comenta. «Cuando empecé a correr leía blogs que me ayudaban y yo empecé a hacer lo mismo. Me gusta transmitir mis sensaciones durante entrenamientos y la carrera en sí y pensé que la idea de mi tío la podía extrapolar a Twitter», continúa. Hoy ha llegado al kilómetro 42 y lo hace, además celebrando su cumpleaños.

Sumando pedaladas con una bicicleta estática y con tablas de ejercicios que comparte con amigas prepara María sus cuartos 42.195 metros: «Todavía no me atrevo a correr por el pasillo», bromea. Antes de estrenarse en el Maratón Valencia Trinidad Alfonso EDP en 2016, era una de esas personas que salían a animar: «Formo parte de la falla Maestro Bellver-Mariano Rivera y animé al resto para que participásemos en el concurso del punto de animación para el maratón. Veía a la gente pasar y me motivé. Me inscribí para la siguiente edición, no podía perderme esa experiencia».

Su debut, pese a la preparación, no fue tan «bueno» como esperaba: «El día de antes, por los nervios, me caí y sufrí mucho durante los últimos kilómetros». No decayó, al contrario, quería quitarse «la espina». En 2017 repitió. No ha vuelto a ausentarse de la línea de salida. En 2020, tampoco.

Esta historia ha sido publicada previamente en el diario Las Provincias​

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